DIANA CAZADORA
María Luisa Arnaiz
Marina Marina
El lectisternio,
‘lectum sternere’, tender el lecho, era una comida que se ofrecía a los dioses
en ciertas solemnidades y recibió este nombre en Roma, aunque la ceremonia era
oriental, por comer sus moradores semiacostados en los triclinios. En “Ab urbe
condita”, V, 2, 13, dice Tito Livio: “Entonces
por primera vez desde la fundación de Roma el duunviro a cargo de los ritos
sagrados celebra el lectisternio… para lograr el favor de Apolo, Latona, Diana...”.
Corría el año 399 a .n.e. y lo que se pretendía era conjurar una epidemia de peste. Bueno es saberlo
por dos razones. Primera, porque Diana, la diosa que rogó a su padre Zeus “la
virginidad eterna”, representa a la mujer independiente a quien se acogían los esclavos; segunda, porque los
duunviros que ejercían la magistratura durante un año tenían entre sus
potestades deponer a los pontífices y decuriones que consideraran indignos en
el desempeño de sus cargos. Traigo estos retazos de mitología e historia a
colación para proponer un lectisternio no con Santamaría, la esbirra diosita del
presidente que nos cree esclavos, sino con algún mirlo blanco a fin de que el juez Silva Pacheco y el magistrado José Castro nos libren de la peste de corruptos y caigan los villanos.
EXCELENTE RELATO Y MEJOR COMPARACIÓN !
ResponderEliminarUn abrazo María Luisa
"la esbirra diosita del presidente" jajaja... muy bueno !
Me alegra que te haya gustado.
EliminarSiempre encuentras ¿o buscas? similitudes. Muy bueno. Abrazos
ResponderEliminarMientras leo, me “asalta” cada idea que ya, ya.
EliminarTengo la misma curiosidad de Ester, cuando leo tus textos no sé que va antes, pero siempre cuadras.
ResponderEliminarUn beso.
Voy de una lectura a otra y me dan pie a escribir algo.
EliminarMais um lindo texto.
ResponderEliminarPassando para visitar vc e desejar uma ótima semana
http:://3fasesdalua.blogspot.com
bjs
Selma
Sempre tão gentil. Obrigado.
EliminarMaría...si en la política no hay corrupción,
ResponderEliminarno es política sino un juego de niños...
ocurre en todos lugares.
¡¡ interesante nota !!!
besoosssss desde Argentina
Tienes toda la razón. Soy una desencantada.
Eliminar¡Habrá que hacer muchíiiiiisimas ofrendas para los dioses se pongan a trabajar y castiguen a tanto corrupto!
ResponderEliminar¡Ni por esas! La mayor parte de los jueces echan una mano a los corruptos.
EliminarMagnífica historia y, claro que sí, me uno devotamente a tu petición, Maria Luisa.
ResponderEliminarAntes tendremos que hallar un mirlo blanco.
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