martes, 4 de febrero de 2014

DOBLE SANGRE

PÍRAMO Y TISBE

María Luisa Arnaiz

Martínez Cifuentes

   Siguiendo a Ovidio, resumo la historia de la pareja antecedente de “Romeo y Julieta. Píramo y Tisbe vivían en casas contiguas y durante la adolescencia se enamoraron. De día se comunicaban por señas y de noche, a través de la grieta de una pared medianera. “Cuando estaban de un lado Tisbe y del otro Píramo y notaban el aliento de sus bocas, decían: celosa pared, ¿por qué eres un obstáculo para los enamorados?” Se consumían de deseo y hubieran querido que la raja fuera algo más ancha para besarse y abrazarse… Acordaron reunirse junto a una sepultura y ocultarse bajo una morera. No bien llegó Tisbe, apareció una leona con la boca llena de sangre. Huyó, perdió el velo, lo rozó el animal; vino Píramo, vio las huellas de la fiera, divisó el ensangrentado velo... Intuyó lo sucedido. “Una sola noche perderá a dos amantes.” Recogió el velo, lo besó y, llorando, se acercó al árbol. “Recibe ahora el sorbo de mi sangre”. Se clavó su espada y el líquido salpicó la fruta. “¡Píramo, responde! Te llama tu Tisbe.” Ella se arrojó sobre la espada, suplicando al árbol que mudara el color de las blancas moras en recuerdo de “la doble sangre”. Desde entonces pintan negro violáceo. 

5 comentarios:

  1. Cuanto más trágica y truculenta sea la historia de amor, más éxito tiene, ¿?
    Salu2, Mª Luisa.

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  2. Me gusta más que Romeo y Julieta.
    Por cierto eres de Clásicas, verdad?

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  3. Cruel, triste y precioso. Aprendiendo contigo voy, querida profesora.

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  4. Con la intensidad que solo tú podrías lograr para narrarnos esa tragedia. Eres grande!
    Abrazoconanís!

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