EL ELEFANTE
María Luisa Arnaiz
Ilustración de “El
principito”, Nuria Balaguer
Había una vez un
cachorro de elefante que escuchó decir a alguien: “mira, allá va un ratón”.
La persona que lo
dijo estaba realmente viendo un ratón, pero el elefante pensó que se estaba refiriendo
a él.
Había muy pocos
ratones en aquel país y, en todo caso, preferían quedarse en sus agujeros y sus
voces no eran muy fuertes. Pero el cachorro de elefante, embelesado por su
descubrimiento, bramó por todas partes: “soy un ratón”.
Lo dijo tan fuerte,
tan frecuentemente y a tanta gente que, créanlo o no, en la actualidad existe
un país en el que casi toda la gente cree que los elefantes, y particularmente
los cachorros de elefante, son ratones.
Es verdad que de
tiempo en tiempo los ratones han tratado de argumentar con aquellos que
sostienen la creencia de las mayorías, pero siempre se les ha hecho huir.
Idries Shah
Ein zauberhaftes Bild zu einer wunderschönen Geschichte.
ResponderEliminarHerzliche Grüsse, Sichtwiese
Un gustazo pasearme por tu blog, me encantó. Volamos a la par por un mundo de emociones y desvaríos.
ResponderEliminarY gracias por seguir el mío, el destino anda revoloteando.
Un beso, vendré a tu rincón muchas veces, a perderme.
I also like what you write in your blog. Best wishes.
ResponderEliminarInma, lo mismo me ha sucedido a mí con tu blog. Ya decía yo que encontraría a alguien con gustos parecidos a los míos.
ResponderEliminarBesotes.
Visitando, conhecendo, lendo.
ResponderEliminarMuito bom e diversificado.
Vou, volto.
abraço.
Oldair: qué amables tus palabras. Quedo emplazada en tu blog.
ResponderEliminarUn abrazo.