martes, 5 de febrero de 2013

EMBRUJO

UN TERCERO EN DISCORDIA

María Luisa Arnaiz
 
Mark Eliot Lovett

   En su “Vida de Apolonio” refiere Filostrato que un mancebo de veinticinco años, Menipio Licio, encontró en el camino de Corinto a una hermosa mujer que, tomándolo de la mano, lo llevó a su casa y le dijo que era fenicia de origen y que si él se demoraba con ella, la vería bailar y cantar y que beberían un vino incomparable y que nadie estorbaría su amor. Asimismo le dijo que, siendo placentera y hermosa, al igual que él, vivirían y morirían juntos. El mancebo, que era un filósofo, sabía moderar sus pasiones, pero no esta del amor, y se quedó con la fenicia y por último se casaron. Entre los invitados a la boda estaba Apolonio de Tiana, que comprendió en el acto que la mujer era una serpiente, una lamia, y que su palacio y sus muebles no eran más que ilusiones. Al verse descubierta, ella se echó a llorar y le rogó que no revelara su secreto. Apolonio habló; ella y el palacio desaparecieron.

Robert Burton

12 comentarios:

  1. A veces uno desearía que los hechizos no se disolvieran; pero, sin duda es mejor la verdad, aunque duela.

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    1. Valoro la actitud de Apolonio como defensor de la realidad aunque el tiempo de la ensoñación nos resarza de ella.
      Besos.

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  2. ¿Y si resultara que esto de la vida fuera en realidad un hechizo, y por ello se va deteriorando lentamente? Esta historia da mucho juego. Bsss.

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    1. Pessoa sostiene algo parecido a esa tesis y yo la barajo a veces.
      Besos.

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  3. Como me gustan esas leyendas Maria Luisa. Muchas gracias por compartirla. Un beso grande.

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    1. Creo que la finalidad del maestro fue desengañar al filósofo por no haber superado esta pasión.
      Besos.

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  4. ¡Uy!... Aquí en España, solamente por intentarlo, Apolonio sería juzgado por el Tribunal Supremo y condenado a callar para siempre. ¡No veas como se las gasta la lamia franquista!

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    1. Alzando la voz contra las apariencias y exponiendo la verdad, desde luego.
      Besos.

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  5. Llevado este asunto al extremo, un omnipotente Apolonio haría desparecer el universo, incluido él mismo.

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    1. Algún Apolonio creo yo que tiene ese poder hoy.
      Besos.

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  6. Este espaço é sempre muito encantador nas imagens e nas palavras.
    Um abraço!!!

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    1. De encantos precisamente trata el cuento. Gracias por tus agradables palabras.
      Besos.

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