María Luisa
Arnaiz
A mi hija Laura
Mujer secándose el
pie, Degas, 1886
“Rodopis era una joven egipcia de gran belleza. Un
día, mientras se estaba bañando, un águila se llevó una de sus sandalias y la
dejó caer a los pies del rey...que…mandó buscar…a la joven…y, cuando la hubo
encontrado, se casó con ella” dice Pierre Grimal en su diccionario. Rodopis, Cara sonrosada (‘rhodos’, rosa, y ‘ope’,
cara), fue convertida en Cenicienta por Perrault y le creó unos zapatos de cristal por error:
leyó ‘vitrum’, vidrio, en lugar de ‘varius’, piel de cebellina. Pues bien,
toda referencia a los pies, al calzado, es una suerte de metáfora de sexo.
Two Bathers on the Grass, Degas, 1886
Berceo cuenta la causa por la que una abadesa queda embarazada:
pisó por su ventura yerva fuert
enconada,
quando bien catido fallóse
embargada.
Alfonso X cómo un
marido pide a la Virgen
que guarde a su mujer en su ausencia y la razón de que tire los zapatos que un enamorado le
regaló:
ca sei que Santa María, en que todo ben iaz,
vos guardou. Et a çapata lle foi en tirar.
Alda, la serrana
del Arcipreste de Hita, exige a cambio de sexo:
et dame çapatas
de cuello bien altas,
de pieça labradas.
Lázaro de Tormes se
estrena sexualmente gracias al fraile de la Merced: “pienso
que rompía él más zapatos que todo el convento. Éste me dio los primeros
zapatos que rompí en mi vida”.
Asimismo, por
medirse el calzado por puntos, Góngora rima:
Que pida a un galán Menguilla
cinco puntos de servilla,
bien puede ser;
mas que calzando diez
Menga,
quiera que justo le
venga,
no puede ser.
Finalmente, hablando
de nuestro país, el dominico Labat escribe:
Las mujeres que van a pie por las calles
jamás se recogen las faldas…por mucho barro que haya…porque una mujer que deja
ver su pie a un hombre le declara…que está dispuesta a concederle los últimos
favores”.
Mujer secándose el pie, Degas, 1886
Das erste Bild gefällt mir, ist sehr ästhetisch...
ResponderEliminarLieben Gruß
CL
Es gran verdad la relación entre los pies y...no sé si el sexo, pero seguro la seducción. De qué sino nos encaramamos las mujeres en esos tacones que parecen anatómicamente imposibles de llevar. Y ni que decir tiene la tortura a que las mujeres chinas de la alta sociedad se sometían hasta hace poco más de cien años, vendando sus pies hasta hacerlos tan pequeños que quedaban mutilados e inútiles para dar unos pasos.
ResponderEliminarComo siempre, genial, María Luisa. Muchas gracias
Los pies suelen ser un símbolo erótico para los hombres.
ResponderEliminarA mi me encanta ver a un hombre descalzo, quizás por la idea que da de intimidad.
Saludos.
Bravo, Maria Luisa
ResponderEliminarA razão de se dar tanto valor aos pies y sexo, seria porque os vestidos rojavam o chão e para os levantar aparecia um pouco dos sapatos e se "idealizava e sonhava a perna e se sentia todo o resto"...
ResponderEliminarGracias pelo seu texto com muito interesse e a sua vinda ao meu blogs, "os7degraus".
Maria Luísa Adães
Muito bem visto e lembrado as conexões das vestes da época faziam dos pés objeto do desejo ... Lindas imagens e palavras Pedro Pugliese
ResponderEliminarMe encantó esta entrada. Los pies son un objeto de deseo sexual y cargado de erotismo. Me gustaron mucho esas referencias a nuestra literatura, en las que se hacía alusión al pago de favores sexuales con zapatos. Yo, personalmente, no me resisto a un masaje en los pies.
ResponderEliminarUn abrazo.
Yes, feet are beautiful.
ResponderEliminarI select Degas to explain the fetishism of the feet.
ResponderEliminarLieben Gruß, Cloudy.
La moda china de mutilar los pies de las mujeres es degradante en Occidente, pero las occidentales se los torturan voluntariamente.
ResponderEliminarSaludos, Mabel.
Si ya en la Biblia se sustituyen los genitales por la pierna o el pie, ¿qué podíamos esperar de un lenguaje controlado?
ResponderEliminarSaludos, ohma.
¡Qué alegría, Enrique, te echaba de menos! Te acompaño en la ruta con un fuerte abrazo.
ResponderEliminarHola, María Luisa: en verdad, lo que se oculta atrae poderosamente la atención.
ResponderEliminarCordiales saludos.
Los pies: fetichismo practicado libremente.
ResponderEliminarSaludos, Pedro.
Aún hay más, Salamandrágora: persiste la idea de que el tamaño de los pies guarda relación con el de los genitales… Ridículo.
ResponderEliminarSaludos.
Feet are beautiful and what they represent.
ResponderEliminarCheers, Robert.
Me encanta el tema mami- muchas gracias por un regalito tan original y bien investigado.
ResponderEliminarBesos
Laura
Y que cumplas...¡muchos más!
ResponderEliminarBesos. Mamá.
Interesante la relación pies y sexo. Lo oculto y el misterio que lo envuelve es seductor.
ResponderEliminarUn beso con anís.
Hola, Sara: desde luego que basta la ocultación para que lo prohibido -el sexo- atraiga como un imán.
ResponderEliminarUn gran abrazo.
Conta-se que no início do Século XX os homens se juntavam junto das paragens dos carros electricos para verem um pedacinho da perna à mulheres quando estas subiam o estribo.
ResponderEliminarGaspar de jesus
Hola, Gaspar de Jesus: lo que refieres es verdad, pues los mismos que controlan la moral de las mujeres tienen que transigir con los tabús que imponen.
ResponderEliminarSaludos corfiales.
Lindos quadros!
ResponderEliminarSilvia Reis
Degas suele inquietar a las mujeres.
ResponderEliminarPara mí es sorprendente.
Un abrazo, Silvia.
Cara Amiga
ResponderEliminarPode ver o seu trabalho publicado num dos melhores Blogues do Brasil.
Aqui: http://www.cimitan.blogspot.pt/
Bjs
Gaspar de Jesus
Hola, Gaspar de Jesus: entré en el blog de tu amigo y vi que, por recomendación tuya, había publicado mi trabajo sobre "Pies y sexo".
ResponderEliminarTe quedo muy agradecida.
Un abrazo.
Maria Luisa,
ResponderEliminarseu amigo Gaspar de Jesus me enviou este seu post e eu tomei a liberdade de transcreve-lo em dois blogs meus: VARAL DE IDEIAS e PÉ DE MOÇA. Obrigado por partilhar tanta arte e informação. Obrigado por estar seguindo o Varal
Seu blog é o máximo.
Hola, Eduardo P. L.: me parece estupenda la difusión que ha hecho de mi post y le quedo agradecida por respetar mi autoría.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
¡Interesante e instructiva!
ResponderEliminarGracias.
Gracias por tu comentario.
EliminarBesos.
Cierto lo que narras, pero desgraciadamente es algo que racionalmente nunca me ha resultado posible digerir, porque desafortunadamente mi mente es en exceso racional, tirando en exceso a analítica. Muy bueno lo que escribes y cómo lo haces. Bss.
ResponderEliminarA mí me resulta incomprensible el fetichismo del calzado pero sobre gustos...
ResponderEliminarBesos.